Visitas

martes, 4 de febrero de 2014

PLATERO Y YO


Sentado en un banco entre las sombras de un árbol todos los días coincido con un anciano que lee un libro. Me pongo cerquita de él sin que se dé cuenta. Cada vez que pasa una hoja apareces en un dibujo. Suave, tierno, ¡tan guapo! Tal vez mañana venga con su nieto y lea en voz alta, entonces sabré más de ti. Mientras tanto sueño con tus largas orejas, tus tiernos ojos negros y con tu hociquillo junto al mío.

No hay comentarios:

Publicar un comentario